CULPA...
Vivir con culpa es vivir con cadena perpetua...
Hace muy poco que he leído esta frase en el libro que me estoy leyendo y es que es difícil hacer memoria y encontrar momentos libres sin sentimiento de culpa, o lo que es lo mismo, momentos donde no nos hemos sentido culpable por alguna causa.
Nos encontramos bien y sentimos culpabilidad.
Nos encontramos mal y sentimos culpabilidad.
Desde el lunes por la tarde se que algunas personas tienen sobre sus hombros el peso de este sentimiento en toda su magnitud.
Tendemos a buscar culpables cuando algo sale mal o falla.
Necesitamos echarle la culpa a alguien, como si eso solucionara o mitigara nuestra pena, decepción o enfado.
El hecho de que el Triatlón Monegrosman226 se haya cancelado no ha estado exento de culpas...
Unas autoimpuestas, otras secundadas con mayor o menor razón, siendo quizá todas justas.
La sorpresa inicial ante este hecho, da paso a la pesadumbre, seguida de la decepción y una profunda tristeza, que solo después deja que sea la aceptación quien asimile los hechos.
Tras estos, nacen, en este caso, nuevos sueños en forma de desafíos, que bien pueden confundirse con segundos platos, pero que no son más que diferentes formas de sobreponernos a hechos inevitables.
Me gusta pensar que es la salida que tomamos ante el inconformismo y el hecho de rendirnos sin haber gastado todos nuestros cartuchos, hasta el último aliento.
Y tras todo esto, esperando entre bastidores..., espera la culpa, que siempre encuentra su hueco, su momento.
Estamos nerviosos por la vuelta.
Estamos nerviosos por volver a ver a los amigos.
Por pasear por esas calles..., el Glacis de La Ciudadela.
Por permanecer bajo la atenta vigilia de Oroel, de Collarada y de toda la inmensidad de las montañas.
Y es que guardamos tantas ganas que no consigo encontrar algo que me hiciera mirar para otro lado.
Esperamos volver con el sexto, con esos 226kms nadados, pedaleados y corridos en las faldas mismas del Pirineo.
Y es que estos próximos días...volvemos a ser aragoneses.
Hala pues!
Vivir con culpa es vivir con cadena perpetua...
Nos encontramos bien y sentimos culpabilidad.
Nos encontramos mal y sentimos culpabilidad.
Desde el lunes por la tarde se que algunas personas tienen sobre sus hombros el peso de este sentimiento en toda su magnitud.
Tendemos a buscar culpables cuando algo sale mal o falla.
Necesitamos echarle la culpa a alguien, como si eso solucionara o mitigara nuestra pena, decepción o enfado.
El hecho de que el Triatlón Monegrosman226 se haya cancelado no ha estado exento de culpas...
Unas autoimpuestas, otras secundadas con mayor o menor razón, siendo quizá todas justas.
La sorpresa inicial ante este hecho, da paso a la pesadumbre, seguida de la decepción y una profunda tristeza, que solo después deja que sea la aceptación quien asimile los hechos.
Tras estos, nacen, en este caso, nuevos sueños en forma de desafíos, que bien pueden confundirse con segundos platos, pero que no son más que diferentes formas de sobreponernos a hechos inevitables.
Me gusta pensar que es la salida que tomamos ante el inconformismo y el hecho de rendirnos sin haber gastado todos nuestros cartuchos, hasta el último aliento.
Y tras todo esto, esperando entre bastidores..., espera la culpa, que siempre encuentra su hueco, su momento.
Estamos nerviosos por la vuelta.
Estamos nerviosos por volver a ver a los amigos.
Por pasear por esas calles..., el Glacis de La Ciudadela.
Por permanecer bajo la atenta vigilia de Oroel, de Collarada y de toda la inmensidad de las montañas.
Y es que guardamos tantas ganas que no consigo encontrar algo que me hiciera mirar para otro lado.
Esperamos volver con el sexto, con esos 226kms nadados, pedaleados y corridos en las faldas mismas del Pirineo.
Y es que estos próximos días...volvemos a ser aragoneses.
Hala pues!
No comments:
Post a Comment