Esta prueba hermanada con el Ironman de Lanzarote y con el Triatlón Titán presume de ser la Meca del Triatlón en España. Dicen que fue allí donde nació este deporte en nuestro territorio.
No se si es cierta tal afirmación, pero no cabe duda de que es una de las más antiguas o, al menos, la única que ha persistido al paso del tiempo.
Es una prueba no muy cara y razonable en lo que se refiere a servicio para el deportista, ya que ofrece una organización correcta, un circuito bonito y exigente y un ambiente muy bueno.
Desde mi punto de vista tiene la incomodidad de las dos zonas de transición tan separadas pero que se solventa con el empleo de las guagüas que desplazan a los participantes hasta el embalse de Pareja.
Esta ha sido mi segunda participación en la prueba y notablemente mucho más grata no por el resultado en la misma, sino por el hecho de que en la vez anterior me presenté en la línea de salida con la motivación por los suelos y muy pocas ganas por competir.
En esta ocasión ha sido muy diferente pero he tenido la contrapartida de que la condición física con la que me presenté no es la adecuada o la deseada para determinados objetivos deportivos.
Es entonces cuando la situación nos arrastra a aferrarnos al deseo de intentar disfrutar al máximo, dejando un poco al lado la presión que , en ocasiones, erróneamente nos generamos.
Esta prueba es ideal para ir con otros compañeros y hacerlo compartiendo gastos ya que planteado como opción familiar es cara, está muy lejos y no hay tiempo de hacer un mínimo de turismo.
Habrá que tenerlo en cuenta de cara a otras ediciones.
Centrándome en la competición en si destaco el hecho de que la misma iba a ser un test de sensaciones de cara al Iberman, probando material, equipo y alimentación. Igualmente la idea era obtener ritmos de competición o más concretamente, recordar cuáles son esos ritmos a día de hoy y con la condición física actual.
No quiero pecar de "masoca" pero es difícil ver positivamente algo que por los resultados no lo ha sido...
El día se presenta nublado y con una temperatura agradable de 19/20ºC que acabó refrescando hacia última hora de la tarde. Un viento del SW bastante molesto, muy racheado y a mi juicio peligroso en determinados puntos del circuito de ciclismo, fue un extra de dureza al perfil ya de por si exigente.
Llegamos con bastante margen de tiempo, ya que aún tenía presente la última vez allí y como tuve que poner el coche a 150km/h y mi pulso a 170ppm por una equivocación en la carretera.
Una ves facturada la bici solo esperaba la confirmación de si el uso del traje iba a estar permitido o no. En mi caso es evidente que lo deseaba...., ya que , al igual que antes, recordaba muy bien aquellos 3000mts de natación agónica sin traje unos años atrás. La suerte estuvo de mi parte y al límite de temperatura, los jueces autorizan de manera opcional el uso del neopreno.
Como algo ligero a base de pasta y soja y bebo lentamente un bidón de Iso Energy para empezar bien hidratado. Casi cuando nos dirigimos a la salida es cuando veo a Julián e intercambiamos algunas impresiones de la prueba y de los pormenores del viaje.
Me despido de los míos y tras la salida de las chicas nos vamos al agua para formar la línea de salida, optando por una zona central de la misma y en medio de la misma (en referencia a su espesor).
Salida y se impone un ritmo vivo y rápido, demasiado para mi, pero como no he calentado pienso que es normal y que en breve ya estaré habituado a la velocidad. No resulta así y entre la incomodidad de nadar rodeado de triatletas sumo el hecho de llevar un ritmo algo por encima de lo que debería, demasiado anaeróbico....Durante unos minutos que me parecen muy largos, sigo con esa sensación un tanto agobiante y me resigno a que no queda opción más que seguir nadando todo lo fuerte que puedo y esperar a que me llegue ese momento digamos de calma/ritmo controlado.....
Llega al doblar la primera boya y se reafirma al doblar la segunda. Ambos giros muy cómodos y sin golpes.
Recta larga a velocidad de crucero y tratar de hacer la técnica de la forma más correcta de la que puedo ser capaz. Todo intentando mantener una buena cadencia de brazada.
Último giro y recta larga final, apretando un poco a mitad de esta.
Salgo del agua en 34', sin hacer muchos aspavientos pero contento por haber cumplido el primero de los tres objetivos.
Me cuesta sacar el traje porque me lío con el velcro del cuello, además que no soy capaz de sacarlo tirando solo con las piernas. Quizá debería cortarle un poco por los gemelos.
Ánimos de Elo y los niños que se dejan la voz...
Salgo con la bici tratando de pillar una buena cadencia en el primer tramo ciclista que es una larga recta repleta de continuos toboganes.
Aprovecho para ajustarme bien las zapatillas y comenzar a comer y beber.
Llegada al primer giro y bajada hasta la zona de los túneles, donde hay que mantener la vista fija en el asfalto, ya que no quiero sorpresas. El viento hace tiempo que ha hecho acto de presencia y se deja notar, lo cual me hace ir con más cuidado.
Tengo aún muy presente la caída y no exagero si reconozco que aún siento cierto respeto ante la posibilidad de irme con los huesos al suelo.
Es curioso el hecho de que haciendo ya tres años que pasé por aquí, recuerdo con muchísimo detalle el trazado del recorrido ciclista.
Es un circuito exigente, siendo en una subida donde me paro a ajustar el sillín tras llevar varios kms notando cómo se movía. Me parece increíble que haya podido desajustarse, pero en el fondo no me extraña porque cuando he sacado la bici del coche, comprobé como la tija se había desplazado hacia dentro, por lo cual tuve que hacer un ajuste "sobre la marcha".
Estoy seguro que este hecho fue de suma importancia de cara a la enorme incomodidad que sentí durante todo el segmento ciclista, siendo incapaz de pedalear con soltura o sin que dejaran de molestarme tanto los lumbares como los cuádriceps.
Tengo que cortar una buena progresión en subida, cuando iba muy suelto y cómodo de cadencia, pero era mejor perder 5' en ese momento que 15' después o arriesgarme a perder el tope del tornillo y dar por perdido el ajuste del sillín.
Aparte de esta pega tuve que sufrir el continuo salto del cambio al exigirle un torque elevado a la transmisión, hecho que me casi me hizo caer al subir escalando.
Poco a poco uno se adapta a estos pormenores y los kms se suceden, viendo como se esfuma mi segundo objetivo de hacer 2h40'. A toro pasado, estaba claro que era demasiado optimista para lo que realmente podía dar.
En los últimos kms empiezo a notar un flato que me incomoda bastante y que me hace temer por una carrera cómoda. Dudo entre dejar de hidratarme para evitar llenar más la panza de agua, pero se que lo que no beba ahora no lo beberé después.
Me bajo de la bici y trato de salir sin volverme loco, recordando esa intención de hacer los 20kms a 4'30''/km, pero el flato que antes molestaba, ahora fastidia mucho más.
Durante esos primeros kms las coas se me ponen un poco cuesta arriba en el aspecto psicológico ya que veo que la prueba se escapa de mi control y me veo en una lenta decadencia hasta un "walking dead" de 20kms.
Por momentos me dan ganas de pararme, de beber más, de no comer nada....de apretar un poco más....
Trato de centrarme y paro a hacer pis, tras lo cual doblo la bisagra un par de veces hacia delante aplicándome una fuerte presión en el costado.
Retomo la carrera y parece que la cosa va mejor.
El resto del último segmento se sucedió en un r ir y venir del flato sin llegar a cuajar del todo, pero mi ritmo de carrera no llegó a ser mejor de 5'/km, muy lejos de lo que esperaba.
Última vuelta y cambio un poco para ver cómo responde el cuerpo, que no lo hace del todo mal y que me deja la duda de si realmente fue un mal día, una mala prueba o si el motor no estaba para más alardes.
Termino contento en parte por haber vencido un fantasma del pasado, haber podido disfrutar de la prueba y darme cuenta de que es un gran triatlón, cuyo principal punto negativo es lo lejos que está.
Me gustaría volver el año que viene.
El resto fue lo clásico que sucede en nuestros viajes familiares, esperando recompensar a la familia con el hotel elegido para el Iberman.
Poco más que contar de la prueba ya que seguimos ultimando los detalles para el Ironman el día 5 de octubre.
Hala pues!
No se si es cierta tal afirmación, pero no cabe duda de que es una de las más antiguas o, al menos, la única que ha persistido al paso del tiempo.
Es una prueba no muy cara y razonable en lo que se refiere a servicio para el deportista, ya que ofrece una organización correcta, un circuito bonito y exigente y un ambiente muy bueno.
Desde mi punto de vista tiene la incomodidad de las dos zonas de transición tan separadas pero que se solventa con el empleo de las guagüas que desplazan a los participantes hasta el embalse de Pareja.
Esta ha sido mi segunda participación en la prueba y notablemente mucho más grata no por el resultado en la misma, sino por el hecho de que en la vez anterior me presenté en la línea de salida con la motivación por los suelos y muy pocas ganas por competir.
En esta ocasión ha sido muy diferente pero he tenido la contrapartida de que la condición física con la que me presenté no es la adecuada o la deseada para determinados objetivos deportivos.
Es entonces cuando la situación nos arrastra a aferrarnos al deseo de intentar disfrutar al máximo, dejando un poco al lado la presión que , en ocasiones, erróneamente nos generamos.
Esta prueba es ideal para ir con otros compañeros y hacerlo compartiendo gastos ya que planteado como opción familiar es cara, está muy lejos y no hay tiempo de hacer un mínimo de turismo.
Habrá que tenerlo en cuenta de cara a otras ediciones.
Centrándome en la competición en si destaco el hecho de que la misma iba a ser un test de sensaciones de cara al Iberman, probando material, equipo y alimentación. Igualmente la idea era obtener ritmos de competición o más concretamente, recordar cuáles son esos ritmos a día de hoy y con la condición física actual.
No quiero pecar de "masoca" pero es difícil ver positivamente algo que por los resultados no lo ha sido...
El día se presenta nublado y con una temperatura agradable de 19/20ºC que acabó refrescando hacia última hora de la tarde. Un viento del SW bastante molesto, muy racheado y a mi juicio peligroso en determinados puntos del circuito de ciclismo, fue un extra de dureza al perfil ya de por si exigente.
Llegamos con bastante margen de tiempo, ya que aún tenía presente la última vez allí y como tuve que poner el coche a 150km/h y mi pulso a 170ppm por una equivocación en la carretera.
Una ves facturada la bici solo esperaba la confirmación de si el uso del traje iba a estar permitido o no. En mi caso es evidente que lo deseaba...., ya que , al igual que antes, recordaba muy bien aquellos 3000mts de natación agónica sin traje unos años atrás. La suerte estuvo de mi parte y al límite de temperatura, los jueces autorizan de manera opcional el uso del neopreno.
Como algo ligero a base de pasta y soja y bebo lentamente un bidón de Iso Energy para empezar bien hidratado. Casi cuando nos dirigimos a la salida es cuando veo a Julián e intercambiamos algunas impresiones de la prueba y de los pormenores del viaje.
Me despido de los míos y tras la salida de las chicas nos vamos al agua para formar la línea de salida, optando por una zona central de la misma y en medio de la misma (en referencia a su espesor).
Salida y se impone un ritmo vivo y rápido, demasiado para mi, pero como no he calentado pienso que es normal y que en breve ya estaré habituado a la velocidad. No resulta así y entre la incomodidad de nadar rodeado de triatletas sumo el hecho de llevar un ritmo algo por encima de lo que debería, demasiado anaeróbico....Durante unos minutos que me parecen muy largos, sigo con esa sensación un tanto agobiante y me resigno a que no queda opción más que seguir nadando todo lo fuerte que puedo y esperar a que me llegue ese momento digamos de calma/ritmo controlado.....
Llega al doblar la primera boya y se reafirma al doblar la segunda. Ambos giros muy cómodos y sin golpes.
Recta larga a velocidad de crucero y tratar de hacer la técnica de la forma más correcta de la que puedo ser capaz. Todo intentando mantener una buena cadencia de brazada.
Último giro y recta larga final, apretando un poco a mitad de esta.
Salgo del agua en 34', sin hacer muchos aspavientos pero contento por haber cumplido el primero de los tres objetivos.
Me cuesta sacar el traje porque me lío con el velcro del cuello, además que no soy capaz de sacarlo tirando solo con las piernas. Quizá debería cortarle un poco por los gemelos.
Ánimos de Elo y los niños que se dejan la voz...
Salgo con la bici tratando de pillar una buena cadencia en el primer tramo ciclista que es una larga recta repleta de continuos toboganes.
Aprovecho para ajustarme bien las zapatillas y comenzar a comer y beber.
Llegada al primer giro y bajada hasta la zona de los túneles, donde hay que mantener la vista fija en el asfalto, ya que no quiero sorpresas. El viento hace tiempo que ha hecho acto de presencia y se deja notar, lo cual me hace ir con más cuidado.
Tengo aún muy presente la caída y no exagero si reconozco que aún siento cierto respeto ante la posibilidad de irme con los huesos al suelo.
Es curioso el hecho de que haciendo ya tres años que pasé por aquí, recuerdo con muchísimo detalle el trazado del recorrido ciclista.
Es un circuito exigente, siendo en una subida donde me paro a ajustar el sillín tras llevar varios kms notando cómo se movía. Me parece increíble que haya podido desajustarse, pero en el fondo no me extraña porque cuando he sacado la bici del coche, comprobé como la tija se había desplazado hacia dentro, por lo cual tuve que hacer un ajuste "sobre la marcha".
Estoy seguro que este hecho fue de suma importancia de cara a la enorme incomodidad que sentí durante todo el segmento ciclista, siendo incapaz de pedalear con soltura o sin que dejaran de molestarme tanto los lumbares como los cuádriceps.
Tengo que cortar una buena progresión en subida, cuando iba muy suelto y cómodo de cadencia, pero era mejor perder 5' en ese momento que 15' después o arriesgarme a perder el tope del tornillo y dar por perdido el ajuste del sillín.
Aparte de esta pega tuve que sufrir el continuo salto del cambio al exigirle un torque elevado a la transmisión, hecho que me casi me hizo caer al subir escalando.
Poco a poco uno se adapta a estos pormenores y los kms se suceden, viendo como se esfuma mi segundo objetivo de hacer 2h40'. A toro pasado, estaba claro que era demasiado optimista para lo que realmente podía dar.
En los últimos kms empiezo a notar un flato que me incomoda bastante y que me hace temer por una carrera cómoda. Dudo entre dejar de hidratarme para evitar llenar más la panza de agua, pero se que lo que no beba ahora no lo beberé después.
Me bajo de la bici y trato de salir sin volverme loco, recordando esa intención de hacer los 20kms a 4'30''/km, pero el flato que antes molestaba, ahora fastidia mucho más.
Durante esos primeros kms las coas se me ponen un poco cuesta arriba en el aspecto psicológico ya que veo que la prueba se escapa de mi control y me veo en una lenta decadencia hasta un "walking dead" de 20kms.
Por momentos me dan ganas de pararme, de beber más, de no comer nada....de apretar un poco más....
Trato de centrarme y paro a hacer pis, tras lo cual doblo la bisagra un par de veces hacia delante aplicándome una fuerte presión en el costado.
Retomo la carrera y parece que la cosa va mejor.
El resto del último segmento se sucedió en un r ir y venir del flato sin llegar a cuajar del todo, pero mi ritmo de carrera no llegó a ser mejor de 5'/km, muy lejos de lo que esperaba.
Última vuelta y cambio un poco para ver cómo responde el cuerpo, que no lo hace del todo mal y que me deja la duda de si realmente fue un mal día, una mala prueba o si el motor no estaba para más alardes.
Termino contento en parte por haber vencido un fantasma del pasado, haber podido disfrutar de la prueba y darme cuenta de que es un gran triatlón, cuyo principal punto negativo es lo lejos que está.
Me gustaría volver el año que viene.
El resto fue lo clásico que sucede en nuestros viajes familiares, esperando recompensar a la familia con el hotel elegido para el Iberman.
Poco más que contar de la prueba ya que seguimos ultimando los detalles para el Ironman el día 5 de octubre.
Hala pues!
1 comment:
Como siempre, volviste a vencerte una vez más. Como me has comentado en otras ocasiones, mientras disfrutemos, seguiremos haciendo este tipo de locuras. Nos vemos pronto compañeros y enhorabuena por ese nuevo finisher
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