Tuesday, November 26, 2024

LA OVEJA NEGRA

 He llegado a comprobar por experiencia propia  nuestros momentos más negros y oscuros,  esos en los que la ansiedad nos inunda y prácticamente nos bloquea, evitando que pensemos con lógica.

En esos momentos es cuando no necesitamos soluciones ni consejos que nos vengan de la mano de aquellos que nos rodean.

Lo que simplemente anhelamos es la conexión humana, una presencia en la distancia, silenciosa e imparcial...

Un toque suave...

Esos pequeños gestos son las reuniones de escalada que nos mantienen fuertes...Los anclas que permiten aferrarnos cuando la vida parece abrumadora.

Y es ahora cuando encarecidamente puedo rogar y suplicar que no se me trate de arreglar. Que tampoco se tome mi dolor ni mis sombras sean alejadas.

Lo que ahora necesito es que, simplemente, te sientes a mi lado mientras trabajo a través de mis propias tormentas internas, mis culpas y responsabilidades.

Solo te pido que seas la mano fuerte que quizá pueda alcanzar cuando haya encontrado mi camino.

Mi dolor y mi pesar es mío para llevar, mis luchas y batallas son mías para enfrentar. Pero has de saber que, tu sola presencia me recuerda que no estoy solo en este vasto y a veces aterrador mundo.

Es un recordatorio silencioso de que quizá y solo quizá, aún soy digno de tu amor, incluso cuando me siento roto. Incluso cuando te sientas rota por mi conducta...

Así pues en esas horas oscuras en las que me pierda en las ciénagas densas de la incertidumbre y del miedo al fracaso total como persona, viendo peligrar mi integridad ética por un camino mal elegido y peor recorrido..., estarás aquí?

No como salvadora, sino como compañera. Sostén mi mano hasta que llegue el amanecer, ayudándome a recuperar mi fuerza.

Tu apoyo silencioso es el regalo más preciado que puedes dar. Es el amor que me ayuda a recordar quién soy. Quiénes éramos hasta que decidí quemar los barcos y no reconocer las consecuencias de ello.

Es el amor lo que me ayuda a recordar quien soy y lo que realmente puedo llegar a ser, incluso cuando me olvido o simplemente me niego.

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