Saturday, May 04, 2013

CRUZ DEL SUR

Parece que hace años que la vi en el cielo, en contraposición de su hermana la Osa Mayor, ambas dirigiendo el rumbo y señalando el camino de navegantes durante siglos.


Aún hoy en día lo siguen haciendo…

Que una cosa tan insignificante a la vista de cualquiera me pueda llegar a cautivar como lo hizo anoche no es raro en mi, que creo haber aprendido a ver esas cosas que a otros se le escapan, a leer entre líneas, a interpretar las señales que la vida, las personas o la Naturaleza nos deja al alcance. Espero seguir madurando y aprendiendo en este sentido, ya que hay mucho por ver y descubrir.
He dejado ayer el Archipiélago de Seychelles, donde la selva más salvaje se fusiona con esas playas de postal, de ensueño, únicas y de una belleza inusitada.
Dejo las islas cansado físicamente porque he aprovechado para exigirle a mi cuerpo entrenamientos, quizá, demasiado exigentes en cuanto a volumen y condiciones de temperatura y humedad. No me arrepiento porque creo terminar con la sensación de no haberme dejado nada dentro, entrenos duros y turismo del que me gusta.
En esta ocasión he vuelto a repetir compañía para alguna de mis aventuras, tal como hice en Omán, y me reafirmo que al final lo mejor siempre resulta ser las propias personas con las que compartes esos momentos. Esta ocasión no ha sido diferente y me siento lleno en ese aspecto, pero por otra parte me asaltan ciertas dudas sobre mi forma de actuar y de pensar.
Se me pasa por la mente el hecho de que corro cierto peligro de entrar en una especie de círculo vicioso y de pensamientos negativos que conduzcan a que me sienta desesperado en ocasiones, contradictorio en otras e incluso desamparado o desgraciado en otras. Es algo extraño, pero no deja de atormentarme por momentos que cada vez están siendo más frecuentes.
A veces lo achaco a todo lo que se me viene encima, a sentir una presión que nunca me ha doblegado, que no me ha hecho llegar a perder la cabeza. Quizá el hecho de escribir estas ideas que me asaltan solo contribuye a alimentar un juego nada conveniente. No lo sé, porque las cosas no son tan sencillas a mis ojos.
Me estaré volviendo loco? Y si es así , por qué?
Hoy el entrenamiento ha sido incómodo, pese a ser un entreno muy suave y regenerativo tras los casi 100kms de carrera hechos en escasos 4 días. Mis piernas eran bloques de cemento armado y moverlas en el rodillo me ha venido de perlas. Igualmente bueno ha sido darle tregua estos días a mi perineo.
Aún no he movido ficha respecto a lo de inscribirme en el Ironman de Gales, y creo que me la voy a jugar a estar ya en España, porque la conexión de internet del barco es peor que mala y no solo va a pedales, sino que desquicia la paciencia de cualquiera. Será lo que tenga que ser.
Se prevé un final de traca muy fuerte, como a mi me gusta, ya que solo concibo la retirada de un sitio cuando lo damos todo y cuando el esfuerzo final es de consideración.

Bueno, lo dejo por hoy porque esto cada vez se parece más a un blog de tarados que a algo sobre triatlón.

Hala pues!

1 comment:

ale said...

En cuanto llegues a España te doy el numero de mi psicologo y de mi camello, y en un par de dias todo ok ;)