Sunday, October 21, 2012

BRAINSTORM

Parece que esta semana se ha cerrado una página con la finalización del curso que empezamos en septiembre y al que tantas horas y quebraderos de cabeza le hemos dedicado.
Si la energía que sentía en mi cerebro pudiese ser empleada como energía efectiva, creo que la ciudad de Las Vegas tendría garantizado el suministro eléctrico por un par de años.
Hacía tiempo que no notaba mi cerebro cortocircuitar de esa manera, y es que en cierta manera me asustaba porque pensaba que podía fundirse.
Acabar con algo en mi trabajo lleva implícito empezar con otra cosa, en ocasiones relacionada con la que finaliza.
Algunos me dicen que no debo destapar la caja de los truenos si no estoy dispuesto a sufrir sus consecuencias.
Otros me miran por encima del hombro y pensando que soy novicio tratando de inventar lo que ya está más que inventado. Mirando con recelo lo que hago y presas de su soberbia que no les permite ver la realidad de su ineficacia.
He estado a punto de renunciar a todo y dedicarme a aquello por lo que me dieron mi plaza, al mantenimiento puro y duro. Sin duda alguna mi vida sería mucho más fácil y mis marcas mejores.
Al menos de momento he decidido seguir intentándolo y lo hago porque creo y se que lo que puedo aportar a mejorar es más y mejor de lo que hay en la actualidad.
Aunque otros se nieguen a verlo así.
Con semejante tempestad en el trabajo, ha sido doblemente difícil el poder sacar adelante los entrenamientos. Pero más que eso, el poder entrenar con la motivación, concentración y disciplina que necesito y me gusta.
Pero como siempre hay luz al final del túnel, esta llegó el sábado en forma de duatlón.
Fue una tarde muy placentera tras dos días de lluvia.
Coincido con más de uno en que el trazado de bici fue arriesgado. Daba miedo circular junto a tanto coche aparcado que a las primeras de cambio te podían salir marcha atrás o abrirte una puerta.
También hubo partes del asfalto algo peligrosas, peatones asustados, etc.
Creo que si se apuesta por algo debe hacerse con contundencia...
Sobre mi actuación decir que solo esperaba eso de disfrutar y , al menos, no sufrir en exceso.
Busco a David porque pienso que puede ser una referencia y con el propósito de enganchar su grupo de bici.
No me las prometo porque llevo muy pocos kilómetros de bike y dudaba de si podría seguir esos ritmos.
El primer 5.000 lo regulo aunque vamos algo fuerte al principio.
En la bici me sorprendí a mi mismo al comprobar que no solo fui capaz de aguantar la rueda del grupo, sino que pude tirar y reaccionar a los palos que daba la gente.
Ruedas cercanas y algún sustillo.
Me bajo a correr y en cuanto me adapto decido no sufrir y aguantar independientemente de si me adelantan un puesto o cinco. El trabajo se hizo y lo mejor fue la sensación. Dice que vamos bien. De momento claro está.
Veremos cómo se desarrolla esta nueva semana.

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