IVY MIKE

 El 31 de marzo de 1952, el atolón  Enewetak, en las Islas Marshal fue testigo de la primera detonación de una bomba termonuclear por parte de los Estados Unidos. La temida bomba H detonó y sus 10,54 megatones de potencia demostraron al mundo la capacidad destructiva de las armas de fusión nuclear....

Hiroshima y Nagasaki fueron cuasi truenos de tormenta de verano comparadas con el poder destructivo de este tipo de artefacto, y las islas del Pacífico, robadas impunemente a sus dueños tras la Segunda Guerra Mundial, albergaron la destrucción y posterior contaminación por radiación de este tipo de pruebas.

Todo valía en plena escalada de guerra fría entre los dos bloques que trataban de posicionar su poder en el nuevo orden mundial.

El 6 de julio de 2023 yo detoné mi propia bonba H tras treinta años de matrimonio y de envidiable relación con la persona que ha significado todo para mi en esta vida.

Una detonación que llegó por sorpresa y sin avisar, cuyas consecuencias fueron devastadoras en el marco de una familia modélica y de una pareja que tenía "algo especial", "envidable" por muchos y, en cierto modo, casí perfecto, donde no había fisuras y la complicidad era máxima.

El destello cegador que sigue a la detonación, rápidamente se complementa con la onda de choque que genera vientos destructivos que lo arrasan todo y generan el caos y la destrucción...

Así fue mi Ivy MIke...

Causó la destruccción de mi "universo", de "mi mundo controlado", de mi entorno seguro, de mi familia y de las personas que, se supone, más quiero en este mundo,... En esta vida...

Las consecuencias de mis actos solo han traído dolor y pesar a quienes interactúan de alguna manera conmigo.

Soy el destructor de mundos y aquel que solo dejq cdáveres a su paso..

He destruido mi vida, la de aquellos a quien más quería y ahora  mismo me encuentro totalmente solo.

Elegí un camino sin retorno, ONE WAY, donde las consecuencias, en el caso de salir mal, serían devastadoras y terribles.

Ningún hombre debe ser juzgado de forma permanente por un error que haya podido cometer, porque de lo contrario su sentencia será una pena de muerte o una cadena perpetua con la que vivir el resto de su existencia.

El perdón es algo que normalmente nos viene dado por nuestros semejantes, que tienden puentes de fraternidad basados en un sentimiento de "reinserción" en sus vidas al tratar de dejar atrás los duros momentos y centrarse en seguir adelante con un claro propósito de esperanza y superación.

Pasar página...Dos palabras que valen oro y que tan difíciles son de llevar a cabo...

Mantenerse en el presente....

Aprender del pasado pero no anclarnos en el....

Vaciar la copa...

Todas ellas frases hechas que, pese a contener una gran verdad, son muy difíciles de ejecutar cuando cada día, cuando amaneces y recuerdas lo que eres, aquello en lo que te has convertido, te cuesta la misma vida buscar una excusa para levantarte y vivir tu propia vida.

No tener motivos para seguir viviendo o no ser capaz de reconocer esos motivos hacen que la montaña, la cuesta, la subida..., sean mucho más empinada y dura de subir.

Somos nuestro peor jurado y nuestro peor juez, ya que somos implacables con nuestros propios errores y no encontramos la manera de perdonarnos para poder seguir adelante con nuestra vida.

Conocí a una persona que me ofreció todo lo que tenía, queriéndome y cuidándome sin medida. De forma gratuita, sincera y altruista.

Compartí con ella momentos de aventura, de complicidad y de sensación de libertad plena.

Cumplí sueños a su lado...

Pero no supe estar a la altura y la perdí...No sin que mi explosión termonuclear causase tantísimo dolor y pena.

No se trata de victimizarse y mucho menos compadecerse, sino de aceptar lo que es cada uno y , por ello, lo que merece.

El 29 de enero de 2024 en una pequeña playa de rocas, cogí una donde grabé la frase : "Estoy solo".

Y es que realmente lo estoy. Solo y acompañado con la peor compañía posible, que en mi caso soy yo....